Dot.exe

Cuando alguien escucha hablar sobre algún tipo de juego maldito o prohibido, el ser humano y su curiosidad siempre intenta averiguar, qué hay de real en la supuesta maldición o rareza de la misma.

Yo mismo he probado todos los juegos sin más sensación que un dolor de cabeza o un mareo sin importancia. Yo soy muy escéptico ante estas cosas, o mejor dicho lo era. Antes de continuar, están advertidos de que esto no es una broma. Y este tipo de juego es peligroso.

Si todavía estás aquí, les contaré sobre el juego que tienes a continuación:

http://www.mediafire.com/download/bcobhyrn7cmpkck/DOT.EXE.rar

Dot.exe es realmente peligroso, y no es recomendable jugarlo si sufres de epilepsia o problemas nerviosos de ansiedad. No voy a desvelarte nada más allá de lo que yo mismo he podido comprobar.

Dot.exe jugó con mi mente, la aterrorizó y la bloqueó durante horas. Un simple punto, buscando por donde escapar. En apariencia parece un simple juego mal hecho lleno de puntos. El problema llega cuando el propio juego empieza a hablarte y a hacerte sentir completamente observado.

Y cuando te hace repetir una y otra vez los mismos pasos, pero cambiando lo que sucede, alterándote, atemorizándote, gritándote. Un simple cuadro terminaba la partida, pero algo me decía; Que una vez que empezaba, no debía parar de jugar.

Tras varios minutos, me di cuenta de que era el juego el que jugaba conmigo. Y no yo con él. Empecé a pensar en cosas que jamás habían pasado por mi mente. Comencé a tener miedo de morir. Miedo de no poder salir de ahí nunca más.

Finalmente no pude soportarlo más y abandoné el juego llorando, temblando, desorientado, confundido, solo, tremendamente solo. Pero ya no quiero ser el único que se sienta así. Por eso estoy aquí con ustedes. Por eso estás aquí conmigo.

Si juegas, puede que haya una pequeña posibilidad de que yo nunca más esté solo. O puede que el juego me perdone y me libere si le traigo a un nuevo juguete con el cual él pueda entretenerse.

Por favor confía en mí, no será nada.

¡SOLAMENTE EJECUTA Y JUEGA EL JUEGO!

— Via Creepypastas