La Fundidora de Monterrey

Allá afuera
Allá afuera

Aquel lugar era un monstruo, pues era inmenso y le daba de comer a tantas familias, trabajaban tantas personas en él que en ocasiones era muy complicado saber quien venía a trabajar y quien no, pero según cuentan ahí murieron algunos trabajadores, pues el trabajo era peligroso…

Aquel lugar era la Fundidora de la Cd. de Monterrey, N.L., México, la cual se dedicaba a la fundición de acero, principalmente para los trenes de toda la república, en ella habían muchos trabajadores, pero ya en estos días es un lugar turístico muy grande y muy hermoso, pues ésta empresa quebró y dejó sin trabajo a miles de familias…

Pero hablando más de aquellos momentos, me tocó enterarme de buena fuente, un trabajador de ese lugar en aquellos tiempos, que había un grupo de los mismos trabajadores que habían hecho una pandilla la cual se encargaba de “deshacerse” de aquellos que se oponían a sus intereses, en un lugar tan grande y con la supervisión que no era debida, en ocasiones tocó que desparecían trabajadores y no se volvía a saber nada de ellos.

Las calderas con el acero ardiendo eran muchas, y muchos trabajadores corrían el riesgo de caer en ellas y, aprovechando esta situación, aquellos “trabajadores” hacían lo posible por que aquel que no estaba de acuerdo con sus opiniones tuvieran algún fatal accidente, sin que nadie se percatará de aquello, y como el acero estaba en estado líquido y con una temperatura muy alta, los cuerpos se desintegraban en cuestión de segundos.

Me cuenta aquella persona, que ya falleció y que me pidió no contará a nadie esto hasta que él ya no estuviera, y así lo hago, que a él le toco ver dos de esos “accidentes”, y que se quedó impresionado con la forma en como nadie se daba cuenta y de cómo aquellos infelices se deshacían en un abrir y cerrar de ojos, no dijo nada por miedo a que a él le pasara lo mismo, pues ya le tenían echado el ojo.

El calculaba que fueron unos 15 o 20 compañeros los que desaparecieron así, pero quizá más pues él solo estuvo unos 8 años en esta empresa, y desde antes se escuchaban rumores al respecto, pero de la misma forma la pandilla se fue disolviendo, pues en accidentes más notorios cada uno de los integrantes fue falleciendo, él me comentaba que los fantasmas de los compañeros fallecidos los habían matado y que a ciertas horas se escuchaban ruidos extraños, incluso gritos de dolor en las calderas y en ocasiones algunos de ellos habían visto a los desaparecidos trabajando cerca de las mismas calderas.

En la actualidad se saben de muchas historias en ese lugar, que aunque turístico también posee otro tipo de atractivo, pues en las noches cuando cierran se escuchan ruidos, gritos de dolor, llantos, y hasta se ven personas paseando sin ser empleados del lugar (esto fue informado por un empleado actual del Parque Fundidora), muchos creen esto, otros no, pero en realidad yo creo firmemente en la persona que me contó la historia, que aunque ya partió me quedo con su sinceridad.

Esto pasó y sigue pasando en mi ciudad, ustedes sabrán si creer o no…

— Via Creepypastas

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