Leyendas Venezolanas – Las 10 leyendas venezolanas más terrorificas

Asesinos del Zodiaco
Asesinos del Zodiaco

Leyendas Venezolanas 4.4 (87.63%) 118 votes

Las Leyendas venezolanas son de mis favoritas, ya que tratan muy diversos temas. Lo que trato de decir es que los mitos y leyendas venezolanas , poseen una narrativa especial que hace que cualquiera que comience a leer este tipo de historias quiera conocer más y más.

Para los que aún no lo saben, las leyendas son relatos que mezclan elementos verdaderos y cosas de la ficción que se van contando de generación en generación. Por ese motivo, es que a veces tenemos distintas versiones de una misma crónica.

Indice

Leyendas Venezolanas Cortas para Niños

En esta sección colocaremos cinco relatos tradicionales de Venezuela especialmente versionados para los niños. Y es que a veces, aunque la gente crea que cualquier leyenda puede ser escuchada por el público en general, lo cierto es que en primer lugar se debe cuidar el lenguaje que se utiliza y en segundo, no todos los términos que se utilizan en una narración de esta clase, son comprendidos fácilmente por el público infantil.

El Silbón

De acuerdo con nuestras fuentes consultadas, los primeros moradores que comenzaron a relatar que habían visto al Silbón se ubicaban en las llanuras de Guanarito , un poblado que pertenece al municipio del estado de la Portuguesa en tierras venezolanas.

La ubicación temporal de estos primeros relatos data de mediados del siglo XIX. Poco a poco estas historias se fueron difundiendo a otros sitios, hasta que llegaron a las poblaciones localizadas cerca de la capital.

Una primera versión asegura que cierta mañana, un muchacho vio que su padre estaba golpeando a su madre. En el momento en el que éste se dio cuenta que estaba siendo observado por su propio hijo, quiso justificar su conducta diciendo:

– Le pegué porque se lo merece, nunca hace las cosas bien.

Eso provocó que el muchacho se enojara muchísimo y comenzara a pelear con su padre. En su desesperación por defender a su madre, el chico cogió un palo del suelo y con este asfixió a su progenitor.

Mientras tanto el abuelo del adolescente, quien había escuchado todo pues se encontraba descansando recostado en la cama del cuarto contiguo, se levantó rápidamente y al ver lo ocurrido, maldijo a su propio nieto diciéndole que ningún hijo le puede arrebatar la vida a su padre.

Luego el anciano se puso en contacto con las autoridades locales, quienes apresaron al muchacho y le impusieron un fuerte castigo por los actos que había cometido. Fue amarrado a un poste y posteriormente azotado varias veces hasta que uno de los gendarmes decidió soltarlo.

Sin embargo, el abuelo que estaba viendo todo lo que acontecía acompañado de su can, le soltó la cadena al perro y le ordenó que lo persiguiera hasta matarlo.

Se dice entonces que el alma del joven se transformó en el Silbón y que el alma de aquel can lo continúa persiguiendo hasta que un día logre atraparlo.

A continuación, te ofrecemos otra de las leyendas venezolanas cortas que hablan sobre este mismo tema.

El Silbón fue un niño caprichoso al que sus padres cumplían cualquier deseo. Por ejemplo, un día sin motivo aparente, el chiquillo le dijo a su papá que tenía ganas de comer estofado de venado. De inmediato, el hombre salió de su casa con una escopeta y se fue al bosque a cazar a un ciervo.

El sujeto demoró mucho más de lo debido, dado que ese día no había venados en el bosque. Cuando por fin arribó de nuevo a su hogar, fue recibido por su primogénito quien le reprochó severamente el no haber cumplido con su capricho.

El padre trató de disculparse de mil maneras, pero el muchachito no quería escuchar razones. El niño aguardó hasta que su padre se fue a recostar a su recámara y una vez que se dio cuenta de que había entrado a la habitación, tomó la escopeta (que, dicho sea de paso, aún estaba cargada) y le disparó por la espalda.

Los disparos fueron escuchados por el abuelo del niño quien de inmediato le ordenó a su perro Tureco que persiguiera a su nieto hasta traerlo a su presencia. De alguna manera, el chico logró escapar hasta que murió y se transformó en un fantasma errante.

La Leyenda de la Ciudad del Dorado

La leyenda del Dorado quizá sea una de las leyendas venezolanas para niños , más conocidas en el mundo, ya que se originó poco después de que los conquistadores españoles llegaron a territorio sudamericano y comenzaran a buscar la mítica «Ciudad de Oro».

Se dice que la codicia de los ibéricos inició cuando un indígena que se hallaba cerca de lo que hoy es el país de Venezuela, les enseñó un antiguo ritual en el que se utilizaba el oro como parte fundamental para llevar a cabo un sacrificio humano.

Los cuerpos de todos los participantes, eran bañados primeramente por una sustancia extraña y luego por polvo de oro. Además, en las ofrendas había diferentes tipos de piedras preciosas.

Según algunos historiadores, La Leyenda del Dorado fue extendiéndose por toda Sudamérica hasta llegar a regiones como Perú o Argentina. Lo malo fue que, en cada una de las adaptaciones posteriores, se le fueron añadiendo un sin número de elementos fantásticos que a la postre acabaron con convertirla en una mera leyenda urbana.

La gente que ha escuchado esta historia, se imagina una ciudad cubierta completamente de oro en la que además existen varias esculturas hechas con piedras preciosas, como las esmeraldas, los zafiros, los rubíes y desde luego los diamantes.

Lo cierto es que este tipo de historias llegaron a surgir debido a que América Latina es un territorio geográfico plagado de minas. El más famoso de todos los exploradores (algunos aseveran que inclusive llegó a Venezuela), fue Sir Walter Raleigh.

Leyenda de la Bolefuego o Candileja

Esta leyenda procede de los llanos venezolanos. Según cuentan los adultos mayores, hace muchísimos años existía una mujer sumamente bella, de estilizada figura y larga cabellera color ébano.

Su piel era morena y sus ojos de un tono azulado, muy parecido al que tiene el cielo. Con el tiempo esa dama contrajo matrimonio con un hombre recio, de nombre Esteban.

Ella (quien por cierto se llamaba Candelaria) soportó que su marido fuera parrandero y jugador, hasta que un día él le mencionó que debía hacer un viaje sólo a un sitio apartado del país.

La mujer le rogó en varias ocasiones que la dejara acompañarlo. Sin embargo, al darse cuenta de que la negativa de su marido sería definitiva, tomó la decisión de no dejarlo partir a aquel poblado.

Le preparó la cena y puso en el té un brebaje que lo haría dormir para siempre. Luego les pidió a sus hijos que le ayudaran a enterrar el cuerpo de su difunto esposo.

Candelaria entonces se convirtió en viuda y de inmediato los pretendientes comenzaron a tocar a su puerta. No obstante, ella les comentaba que su corazón estaba al lado de su marido.

Su situación fue muy difícil hasta que su hijo Sigifredo se convirtió en un adolescente y comenzó a trabajar. Mientras tanto, doña Candelaria se había vuelto sumamente celosa y posesiva, a tal punto de evitar que su primogénito se relacionara con alguna muchacha del pueblo, pues decía que de ser así lo perdería para siempre.

Lo mismo pasó con Esteban (su segundo hijo) al llegar a la pubertad. Luego de varios años, la dama finalmente murió y en el momento en el que tuvo que entregarle cuentas a Dios, fue cuando recibió un severo castigo por impedir que sus hijos encontraran el amor.

La convirtió en una «bola de fuego», cuya misión principal es la de espantar a aquellos hombres que anden afuera de sus casas a altas horas de la noche.

Como en otra clase de leyendas, existe una manera de librarse de los ataques de la Bolefuego. Lo más simple es lanzar maldiciones al aire cuando te encuentras frente a ella, ya que eso la ahuyenta.

Por el contrario, si empiezas a rezar para tratar que, por medio de la intervención divina, esta se aleje de ti, lo único que conseguirás es que sus llamas se aviven.

Leyenda de Florentino y el Diablo

Florentino era un hombre que no le temía a absolutamente a nada. De hecho, una de sus grandes aficiones era siempre buscar situaciones de peligro, pues de esa manera era la única forma de liberar su adrenalina.

Por si fuera poco, aquel sujeto se jactaba de conocer todas y cada una de las veredas del Llano. Eso lo convertía en un sujeto muy escurridizo, ya que podía guiar a su caballo a sitios que sus perseguidores no conocían.

Otra de las cualidades de Florentino, es que sabía bailar como el mejor. No había nadie en el pueblo que bailara también como él. De hecho, hay quienes dicen que ni el mismo diablo se animó a «desafiarlo» en la pista de baile.

Sin embargo, Satanás se animó finalmente a retarlo. Esta leyenda es una de las más extrañas que encontrado en Venezuela ya que se divide en varias partes.

La primera de ellas corresponde a lo que los antiguos definirían como el Duelo. O sea, la vez en la que el diablo se encontró cara a cara con Florentino y lo desafió a un contrapunteo.

La segunda parte nos señala que el hombre se quedó aguardando a que Belcebú eligiera el instrumento musical que utilizaría para «la contienda». En total había cuatro de estos: Un par de maracas, un cuatro, una bandola y un arpa.

Al final del reto, Florentino resulta vencedor justo en el momento en el que el sol comenzaba a salir por el horizonte. Algunas personas creen que resultó triunfador gracias a esto, ya que los rayos solares le afectan al Diablo. Sin embargo, hay otras personas que piensan que dicho sujeto pudo ganar, gracias a que conocía varios conjuros de magia negra.

Cualquiera que sea el caso, lo que es una realidad es que Florentino no volvió a cantar ninguna otra vez en su vida, ni mucho menos a coger un instrumento.

Ahora analizando esta leyenda desde un punto de vista histórico, para ningún venezolano es un misterio que su autor, estoy hablando de Alberto Arvelo Torre Alba haya elegido a estos personajes representativos de la región de Santa Inés, puesto que fue en esa zona en donde el general Zamora obtuvo la victoria en contra del ejército centralista, quienes tenían como misión principal mantener el sistema oligárquico en aquel país.

La leyenda de la Sayona

Esta es una de las leyendas venezolanas de miedo que comúnmente aparece en cualquier libro de mitos antiguos sudamericanos. La gente de los pueblos decía que cada vez que se aparecía aquella misteriosa dama fantasmal ataviada con una bata de color blanco y cabellos negros, la energía eléctrica comienza a fallar invariablemente.

Al batón o la batola en Venezuela se le conoce como Saya, es por eso que a esta aparición se le dio el nombre de la Sayona. Se cree que este ente aprovecha las noches oscuras, para aparecerse frente a hombres solos que caminan por la calle.

De inmediato los sujetos quedan cautivados por la belleza de la mujer. No obstante, al aproximarse a ella se dan cuenta de que es un espíritu. Por si esto fuera poco, la dama al tenerlos a poca distancia abre la boca y les deja ver su blanca y afilada dentadura, que está lista para darles un mordisco.

Durante su vida, ella fue una mujer extremadamente celosa a tal grado que terminó matando a su marido, pues pensó que le era infiel con una de sus vecinas.

Es por esta razón, que ahora la Sayona merodea por las noches en busca de esposos infieles o cualquier otro hombre que éste lejos de su familia. En caso de que se te aparezca, lo que debes de hacer es correr lo más pronto posible, si no quieres acabar tres metros bajo tierra.

Te lo dice alguien que ha dedicado gran parte de su vida a investigar leyendas y mitos no sólo del continente americano, sino de todo el mundo. Pues creo que, al conocer historias procedentes de distintas regiones del globo terráqueo, nuestra cultura universal crece de manera exponencial.

Leyendas Venezolanas de Miedo

Me ha pasado más de una ocasión que la gente confunde leyendas de miedo con el concepto de**leyendas urbanas** **venezolanas** , cuando lo cierto es que son conceptos completamente distintos y enseguida explico el porqué.

Una leyenda de miedo es aquella que ha pasado de generación en generación y que en cada una de sus versiones ha adoptado nuevas características, sin perder su sentido original.

Dicho de otra manera, se trata de un relato de terror originado en otro tiempo, que tiene como peculiaridad principal el contarle al público algún fenómeno extraño que no tiene explicación.

Por su parte, las leyendas urbanas de Venezuela son mucho más modernas al igual que la manera en la que son difundidas.

La leyenda de la llorona

Se le dio el apodo de la « Llorona » a una chiquilla venezolana que quedó perdidamente enamorada de un soldado. De ese romance nació una lindísima niña.

Sin embargo, al enterarse de lo sucedido, el militar se negó a hacerse cargo de ambas y la muchacha quedó sola a cargo de la criatura. Se dice que el llanto de la infanta era tan fuerte que su madre llegó a tener los nervios de punta. Por tal razón, un día la mujer acabó matándola con sus propias manos.

Minutos después la muchacha recobró la conciencia y se dio cuenta de lo que había hecho. Fue entonces cuando comenzó a llorar desesperadamente. Sus alaridos atrajeron a sus familiares, quienes al notar lo que había sucedido, le lanzaron una maldición.

Posteriormente ella dejó su casa y se fue con dirección al llano en donde se perdió para siempre, hasta que se convirtió en un espíritu. Se sabe que ella se dedica a robar a los niños que están lejos de su casa o que se encuentran solos en el campo.

De acuerdo a lo que me contaron una vez, la época del año en donde más se aparece la llorona es en primavera (concretamente, comenzando la Semana Santa).

Su representación clásica es la de una jovencita de tez morena, con cabello largo y negro. Se encuentra vestida con una bata blanca y encima una capucha de color negro.

En algunas ocasiones se le puede ver sosteniendo lo que pareciera ser un recién nacido, aunque sólo se trata de una ilusión. También una de las frases que repite con mayor frecuencia es la de: ¡Mi Hija, mi hija!

Las madres venezolanas de épocas anteriores asustaban a sus hijos que se portaban mal, diciéndoles que si no obedecían las reglas del hogar le llamarían a la Llorona para que se los llevara para siempre.

Finalmente hay algunos que encuentran ciertas similitudes entre esta leyenda y la de la Sayona (de la cual ya hablamos anteriormente). Sin embargo, cabe recordar que, en el caso de la segunda, su objetivo es espantar a hombres infieles en tanto que la Llorona, sólo desea encontrar a su hija.

Te dejamos esta otra versión de La leyenda de la llorona corta

Leyenda del Ánima Sola

Este es un relato espeluznante que trata acerca de una aparición que se dedica hacerles daño a inocentes, utilizando diferentes tipos de efectos psíquicos. A esta se le conoce comúnmente como el Ánima Sola.

Su función en la Tierra es la de encontrar a aquellas almas buenas. Cabe señalar que, en los pueblos latinoamericanos, la gente acostumbra pedir milagros o «favores» a los espíritus buenos, para que les ayuden a resolver una determinada situación.

Es en este instante en el que el Ánima Sola aparece. Se dice que este ente, se apodera del alma de quien pide el favor, si este no cumple con lo prometido en el tiempo establecido.

Supongamos que tú le pides un milagro a un alma buena y le dices que cuando te lo conceda le encenderás una veladora diaria durante todo un año. En el caso de que tu petición sea cumplida y no realices el «pago» que conveniste, tu alma se irá al infierno.

En la región de Guatire, se decía que había una señora muy devota, que por azares del destino se olvidó de encender la vela que había prometido. Esa misma noche, llamaron a su puerta.

Se trataba de una amiga muy querida a quien ella tenía mucho tiempo de no ver. En cuanto la visita ingresó al domicilio, se transformó en un espíritu oscuro que sujeto a la otra mujer del cabello y la azotó en repetidas ocasiones contra el suelo.

La pobre señora con el rostro sangrando, se arrastró como pudo hasta que llegó al altar y sacando un fósforo del bolsillo de su delantal encendió la vela de las ánimas.

En ese preciso instante, el espíritu abandonó el hogar y la mujer jamás volvió a ser molestada por otra criatura del más allá, ya que hasta el día de su muerte mantuvo una vela encendida en su altar.

El perro de la Pastora

Tal y como su nombre lo indica esta leyenda tiene como protagonista a un can. Se trata ni más ni menos del fantasma de un perro que se aparece de vez en cuando en el barrio de la Pastora.

Algunas personas que afirman haberlo visto, aseguran que el galgo se sube en el autobús que va en dirección a la parada de Torrero y que se baja de la unidad hasta que llega a la estación de Puerta de Caracas.

Como la gran mayoría de gente que aborda ese transporte es nativa del lugar, no se espanta al sentir cerca la presencia del perro de la Pastora, ya que dicen que es un fantasma que no le hace daño a nadie.

No obstante, gente que va de otros lugares de Venezuela o bien son originarios de otro país, quedan aterrorizados al ver cómo un espectro canino se les queda viendo durante todo el trayecto.

Hay quienes aseveran que lo que ocurrió con este animalito fue que murió atropellado en una carretera cercana al paradero de autobuses y por eso, acostumbra subirse a esta clase de transporte.

Sin embargo, hay una variación a esta leyenda en la que se dice que originalmente el perro era de una casa cercana, pero un día su dueño salió de su domicilio y el animal al notar que jamás regresó, fue a buscarlo por todas partes.

Luego el no comer alimento ni beber agua, lo fue debilitando hasta que finalmente murió. A pesar de eso, el can continúa buscando a su dueño aún después de la muerte. Historias como esta nos recuerdan la nobleza de algunos animales, quienes siempre anhelan estar a nuestro lado.

En la Pastora hay otra historia que nos habla acerca de una muchacha hija de una señora sumamente católica. Se dice que la chica se dio cuenta que su novio lo engañaba y de inmediato fue a buscar a un brujo para que éste le diera una pócima para llamar al diablo y así vengarse de su pareja.

La joven bebió el brebaje y enseguida entró en contacto con Satanás a quien le ofreció darle su alma, a cambio de que le diera el poder de castigar a su ex prometido.

«El señor de las Tinieblas» aceptó de inmediato el pacto. A partir de ese momento, a la jovencita le salieron un par de cuernos en la frente. De igual forma perdió el habla, por lo que el único sonido que salía de su boca eran gemidos y aullidos muy parecidos a los que hace un jabalí.

La muchacha cumplió su cometido y el Diablo al notar que el hombre había muerto de una forma aterradora, le permitió a ella seguir en este mundo, para asustar a los infieles.

La Loca Luz Caraballo

Siguiendo con las leyendas de Venezuela , ahora le toca el turno a la historia de Luz Caraballo. Ella fue una mujer conocida por casi todos los moradores de ese país, porque vivió en la época en la que se llevó a cabo la lucha por la independencia.

Por si esto fuera poco, Andrés Blanco se encargó de convertirla en un personaje emblemático de la literatura venezolana. La vida de esta dama se convirtió en tragedia precisamente cuando sus hijos se fueron a los campos de batalla.

Pasaban y pasaban los años y la mujer no perdía la esperanza de volver a verlos. Sin embargo, nunca más tuvo noticias de ellos. Esto desencadenó una serie de problemas mentales y de salud, los que paulatinamente la condujeron a que perdiera por completo la razón.

Un día sin avisarle a nadie salió de su casa y nadie jamás volvió a verla en ningún lado. No se sabe si murió de causas naturales o si fue asesinada por alguien.

En algunos relatos se dice que su espíritu vaga por aquellos lugares en los se realizaron los combates, pues al menos quiere encontrar los restos de sus hijos.

Los lugareños además me dijeron que los lugares en donde espanta a los caminantes con mayor frecuencia es en los caminos que van desde Chachopo y que concluyen en Apartaderos.

Es sumamente triste saber que este tipo de leyendas, sólo son un reflejo de la angustia que sufrieron muchísimas madres, no sólo en el tiempo en el que muchas regiones de Sudamérica lograron su independencia, sino también de aquellas que continúan sufriendo aún hoy en día con el desarrollo de las guerras modernas en las que cada día que pasa mueren un sin número de inocentes al rededor del mundo.

El Doctor Knoche

Con este relato concluimos las 10 leyendas venezolanas más representativas de este bello territorio. Tal y como te podrás dar cuenta, la mayoría de estas historias tiene relación con fenómenos paranormales.

La narración que te vamos a contar a continuación tiene que ver con la vida del Dr. Gottfried Knoche, un inmigrante de origen alemán que arribó a Venezuela a principios del siglo XIX (concretamente en el año de 1800).

Luego de recorrer varias poblaciones, decidió establecerse en Galipán, sitio en donde encontró una lindísima hacienda, a la que todos conocían como la «Hacienda Buena Vista».

Poco a poco se fue ganando el respeto y la admiración de la gente, debido al extraño trabajo que desempeñaba. Él era un taxidermista, que después se transformó en un magnífico embalsamador.

En caso de que aún no lo sepas, un embalsamador es la persona que «arregla» a los difuntos para que sus cuerpos no se deterioren.

Esta labor la llevaba a cabo con aquellas personas que eran extranjeras y que no pertenecían a la fe católica. Vale la pena resaltar que, en el siglo XIX, aquellos que no eran cristianos, no eran dignos de ser enterrados en un camposanto, pues esto iba en contra de la religión.

Tampoco las leyes civiles estaban de acuerdo en el hecho de que se enterrara en los panteones a personas que habían acudido de otros lugares y que no habían adoptado las doctrinas del cristianismo.

Hoy en día es casi imposible imaginar cómo era la morada de aquel célebre galeno, ya que lo que queda literalmente son sólo escombros. Hay que considerar que además del paso de las décadas, también algunas personas han hurtado cosas de ese lugar.

Tampoco es posible ver ninguna de las momias del doctor Knoche. Sin embargo, si te tomas el tiempo de entrevistar a varios de los moradores de ese sitio, seguramente escucharás toda clase de leyendas acerca de las apariciones de las momias o del doctor durante las noches de luna llena.

Sin duda alguna, una crónica que te deja con los cabellos de punta, sobre todo si te encuentras sólo en una región apartada del bosque.

De esta manera cerramos esta recopilación de mitos y leyendas de Venezuela. Si te gustó el artículo, te pedimos que por favor lo compartas con tus amigos y familiares. De igual forma agradecemos infinitamente el que nos hayas hecho el favor de visitarnos.

Te puede interesar:


 

 


Total
0
Shares
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Related Posts
Asesinos del Zodiaco

5 de Mayo

La Batalla de Puebla fue un enfrentamiento con cede en la ciudad de Puebla el5 de mayode1862, en…
Read More