SobreHidratacion (cuento experimental corto)

Historia:
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¿Que significa acuafobia?

Acuafobia(wikipedia):Mientras que la hidrofobia es un miedo anormal e insistente al agua, la acuafobia es el miedo persistente irracional hacia el agua. La acuafobia es una fobia específica. Esto supone un nivel de miedo que va más allá del control de paciente y que puede interferir en su vida diaria. Las personas pueden sufrir de acuafobia de muchas formas, incluso sabiendo que el agua del mar, de un río o incluso de una bañera no supone una amenaza inminente. Las personas que sufren de esta fobia suelen evitar actividades tales como andar en bote o nadar, incluso habiendo adquirido las nociones básicas del nado.

Historia:

No sé si cuando era bebe realmente sucedieron estas cosas, esta es la historia que mi padre me contó:

De bebe casi me llega la muerte, a manos del suicidio de mi madre, en el cual lleno la tina de agua helada, y hundió la cabeza sobre ella, junto conmigo. Ella ceso antes que yo, por lo que logre salvarme por poco.

Cuando mi padre vio lo horrible escena, me contó que sintió ganas de morir en el momento, que todo era una pesadilla. Me llevo rápidamente al hospital, donde estuve internado en cuidados intensivos por la gran cantidad de agua que había ingresado en mis pulmones . Luego de unos meses me cure físicamente, pero no mentalmente. Nunca más podría vivir normalmente, puesto que desarrolle acuafobia.

Mi padre, ya unos años después, culpándose por el suicidio de mi madre, cayó en una depresión muy grande. A veces recuerdo que se emborrachaba, incluso hubo días en los que no cenaba por su borrachera, pero son recuerdos borrosos.

Para bañarme tenía que prepararme mentalmente, meditar, y hacerlo lo más rápido posible. Una vez tuve una experiencia horrible: en verano, con mucho calor, decidí entrar rápido bajo el agua, sin preparar mi mente. Fue una mala idea. Comencé a sufrir algunas alucinaciones por el fuerte terror que generaba la fobia. Veía la sombra de una mujer cerca de la tina, y el agua se oscurecía lentamente a su paso. Apenas pude gritar una vez, puesto que luego el terror fue tanto que no pude pronunciar ni una palabra más. Mi padre, que por suerte estaba lucido, escucho el único grito que pronuncie, y pronto me saco del baño.

Esta experiencia me dejo algunas secuelas temporales, no pude bañarme en meses, en los cuales usaba toallas húmedas para limpiar mi cuerpo. Cuando finalmente cesaron las secuelas, volví a bañarme, ahora siempre preparándome mentalmente antes.

Lamentablemente, llego un día fatal, en el cual en medio de la noche simplemente me levante sediento, con la boca completamente seca. Tome lo primero que encontré del refrigerador y volví a dormir. A los minutos tuve la necesidad de ir a orinar, por lo que fui.

Al terminar de hacerlo, me di vuelta y vi aquella sombra de mujer otra vez, no me lo explicaba, esta vez no entre en el agua y aun así la veía, tan oscura y real como la otra vez.

No me ataco fisicamente, pero me hizo algo peor, lo hizo psicologicamente. Comenzó a susurrarme en la nuca , pero no logre entender que decía, con cada susurro aumentaba el volumen de su voz. Yo, asustado , decidí alejarme corriendo del lugar y cerrar la puerta. Para mi desagradable sorpresa, aun escuchaba los susurros en mi nuca, nunca se detuvieron.

Fui a la habitación de mi padre gritando que algo me susurraba, el creía que tenía alucinaciones e intento

calmarme. Todo fue en vano, me precipite más cuando descubrí que él no escuchaba nada. Me dolía la cabeza, esos susurros sin suspiro estaban atormentando mi mente.

Hasta el dia de hoy, veinte años despues, escucho esos susurros. Con el tiempo aprendi a controlarlo, calmando mis nervios, pero nunca logre que cese.

Hasta hoy, que finalmente resolvi suicidarme, en la tina donde mi madre lo hizo. Comencé a sofocarme y sentir como el agua llenaba mi estomago y lavaba mi garganta. Antes de cerrar mis ojos por ultima vez, vi la cara de mi madre, ella me observaba desde arriba de la tina.

Algunos dicen que la fobia me había llevado a lo locura, hasta la muerte. Otros que el espíritu de mi madre me atormentaba. Lo único que se es que aún sigo en mi casa, como un ser intangible, a punto de presenciar el suicidio de mi padre, mi último sufrimiento.

— Via Creepypastas

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