Dame la mano

Asesinos del Zodiaco
Asesinos del Zodiaco

Hands
Dos amigas que duermen en la misma habitación se asustan a media noche por una tormenta, por lo que deciden darse la mano la una a la otra para consolarse, de esta forma ambas se quedan dormidas. Hasta que a la mañana siguiente…

Una chica se queda a dormir en la casa de su amiga después del colegio, entre juegos y risas acaban contando historias de terror por lo que ambas se van a dormir bastante asustadas. Las dos se acuestan en la misma habitación aunque lo hacen en camas separadas porque la hermana de una de ellas había fallecido el año pasado en un trágico accidente doméstico y la cama quedaba libre.

Mientras tratan de conciliar el sueño comienza una tormenta y entre el miedo que les ha producido contarse historias de miedo y los truenos que empiezan a sonar, ninguna de las dos puede dormirse. Cuando el sonido de la tormenta se hace más intenso ambas empiezan a temblar de miedo y una de ellas asustada le dice a la otra:

“Dame la mano”

Ambas estiran sus brazos desde sus camas para consolarse y protegerse la una a la otra, mientras se dan la mano su miedo parece desvanecerse por lo que finalmente a altas horas de la noche ambas se quedan dormidas.

A la mañana siguiente se despiertan con total normalidad, el día parecía haber aclarado por lo que deciden salir a jugar al jardín de casa. Pero antes la madre les prepara un desayuno que ambas comparten mientras recuerdan el susto que pasaron la noche anterior.

“Menos mal que me diste la mano anoche, me moría de miedo” – dijo una de ellas.

“Gracias a ti amiga, yo estaba tan asustada como tú”

La madre que escucha la conversación les pregunta si han movido las camas, ya que están muy separadas la una de la otra y sería imposible que sus cortos bracítos se alargaran tanto como para que se pudieran dar la mano estando acostadas.

Las dos amigas confundidas vuelven a la habitación, prueban a darse la mano nuevamente estando tumbadas. A ambas les recorrió un escalofrío por la espina dorsal al comprobar que sus manos quedaban a casi un metro de distancia con los brazos totalmente estirados.

Parece que esa noche no sólo los vivos tenían miedo.

— Via Creepypastas

Total
0
Shares
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Related Posts
Asesinos del Zodiaco

La autopista 86

Era una noche tan oscura, que únicamente me permitía ver unos metros adelante en el camino, y eso…
Read More
Asesinos del Zodiaco

Espectare sufra te

Siempre escuchamos historias de fantasmas en las escuelas. Sin importar en cual escuela hallas estado, nunca falta alguna…
Read More
Asesinos del Zodiaco

Maese Leonhard

Maese Leonhard está sentado inmóvil en su sillón gótico, y con los ojos bien abiertos, mantiene su mirada…
Read More
Asesinos del Zodiaco

SCP-583

Ítem #: SCP-583 Clasificación del Objeto: Euclid Procedimientos Especiales de Contención: SCP-583 debe ser asegurado en una caja…
Read More
Asesinos del Zodiaco

Debajo de la cama

Fernando me contó una historia sobre sus hermanas cuando eran jóvenes. Yo pensaba que Fernando era hijo único,…
Read More